• Hacienda informó que recaudó 124,000 mdp por encima de lo programado entre enero y julio de este año.
  • Pero la inversión pública cayó casi 5% en el mismo periodo, con un desplome en Salud de 55%.
  • En medio de una política de austeridad, el gasto público cayó 9% en julio, con respecto al mes inmediato anterior.

Los ingresos tributarios muestran una buena racha en los primeros siete meses del año. A pesar del impacto económico de la pandemia a inicio de año, los ingresos públicos fueron mayores en 124,000 millones de pesos, en el periodo enero-julio, en comparación a lo inicialmente programado. Esto representó un aumento de más de 8% con respecto al mismo periodo del año pasado, de acuerdo con el informe mensual de la Secretaría de Hacienda.

Pero, a pesar de este aumento de recursos, se está observando una política de austeridad que disminuye el gasto público, lo que también tiene un impacto en inversión pública. Tan solo en julio, el gasto neto del sector público registró un desplome mensual de 9%. Principalmente por una caída de 18% en el gasto corriente durante el mismo lapso.

Y entre enero y julio de 2021, se reportó una caída de casi 5% en la inversión física presupuestaria en términos anuales. Esta se utiliza para la construcción de infraestructura como escuelas, hospitales, carreteras, entre otros. Durante este periodo, la caída más fuerte se observó en el sector salud, con un desplome de 55% anual en los primeros siete meses del año.

En educación, la inversión física cayó 24% anual entre enero y julio. En el rubro de comunicaciones y transportes, disminuyó 19% en el mismo lapso; mientras, la inversión en el sector eléctrico subió 12%. Solamente en el sector hidrocarburos se observó un aumento sustancial de 12% anual, al reportar un total de 161,641 millones de pesos.

Al tiempo, se recuperan ingresos petroleros y tributarios, indicó Hacienda

Pero en medio de esta política de austeridad y menor inversión pública, los ingresos petroleros y tributarios del gobierno federal se recuperaron durante los primeros siete meses del año. La renta petrolera superó el programa en por lo menos 4,700 millones de pesos, casi 40% por encima de lo observado entre enero y julio del año pasado.

En tanto, los ingresos tributarios, aquellos que provienen del cobro de impuesto, superaron en 11,000 millones de pesos a los inicialmente programados. Esto representó un aumento de 2% en términos reales —contando el efecto de la inflación— con respecto a los primeros siete mes del año pasado.

Estos ingresos provenientes del cobro de impuesto ahora representaron casi dos terceras partes (63%) del presupuesto público; «por encima de los promedios de 54.6% y 42.5%, observados en las dos administraciones anteriores», aseguró Hacienda.

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