- El Banco de México (Banxico) mejoró su pronóstico de crecimiento a 4.8% para 2021.
- El Covid-19 es uno de los principales riesgos para la recuperación a pesar de las vacunas.
- El aumento en las exportaciones ayudó a la recuperación, pero otros sectores se mantienen a la baja.
El Banco de México (Banxico) actualizó su pronóstico de crecimiento económico para este año, según su informe del cuatro trimestre de 2020. El instituto central ahora preve que el Producto Interno Bruto (PIB) repunte en promedio 4.8% en 2021, una cifra ya lejana al 3.3% que vaticinó en su informe previo. Pero aunque la economía mejoró, prevalecen los riesgos.
La actividad económica continuó su recuperación —aunque a un menor ritmo, advirtió el banco central. La demanda externa de productos mexicanos ayudó a esta mejoría, especialmente en el sector automotor. Sin embargo, el consumo y los servicios como el comercio tuvieron una recuperación más lenta.
«No obstante, la actividad económica se mantiene por debajo de su nivel previo a la emergencia sanitaria y enfrenta un entorno de alta incertidumbre», advirtió Banxico en su informe. Aquí te presentamos los seis riesgos a la baja que acechan a la economía mexicana en 2021.
1. Más periodos de confinamiento por el Covid-19 y retraso en las vacunas
El primer riesgo que enumeró el banco central fue que se prolonguen las medidas de distanciamiento social o se tomen medidas más estrictas para contener los contagios de Covid-19. Este es un factor que afectaría a la economía mexicana si estas medidas se imponen a nivel nacional, o fuera del país.
A pesar de que ya comenzó la vacunación contra el Covid-19 en territorio mexicano, retrasos en la producción del medicamento, su distribución o aplicación representaría también un retroceso para la recuperación económica.
«No obstante los recientes anuncios sobre los avances en el desarrollo de varias vacunas y el inicio de campañas de vacunación en varios países, incluyendo México, se considera que los riesgos para el escenario central se mantienen sesgados a la baja, si bien en menor grado que en el informe anterior», señaló Banxico.
2. La volatilidad en los mercados financieros internacionales
El segundo factor podría ser la volatilidad en los mercados internacionales. Banxico teme que mayor incertidumbre podría disminuir y encarecer el flujo de financiamiento que obtienen los países emergentes como México.
La aversión al riesgo en los mercados podría venir de distintos frentes. Un aumento en la tasa de interés de largo plazo en Estados Unidos, o la pérdida de confianza de los inversionistas por la evolución de la pandemia —a pesar de la llegada de las vacunas— pondría en una situación difícil a gobierno y a empresas al momento de solicitar financiamiento en el exterior.
A pesar de que Banxico registró un comportamiento positivo de los flujos de financiamiento en meses recientes «se han presentado algunos episodios de mayor volatilidad. En particular, en las últimas semanas se observó un repunte en la volatilidad de los mercados financieros», advirtió.
3. Que las afectaciones por la pandemia sean de carácter permanente
Banxico también consideró el riesgo de que las secuelas que dejó a su paso el Covid-19 sean permanentes en la economía. Algunos de los impactos que ha generado la pandemia es debilidad en el sector servicios como el comercio, los restaurantes y los servicios de alojamiento.
«Aún están por determinarse las secuelas y efectos más permanentes sobre la economía y su potencial de crecimiento», indicó el instituto central.
4. Reducciones en la calificación de la deuda soberana y la de Pemex
El banco central dice que hay que mantenerse alerta por una posible caída en la calificación crediticia de México o de Pemex. La nota crediticia es un indicador que le ayuda a los mercados financieros calcular el costo del financiamiento a un país, o a una empresa como Pemex. Entre más baja sea la nota, peores pueden ser las condiciones del crédito.
Tanto la calificación de México y de Pemex se mantiene en revisión para una posible reducción entre las principales agencias que son Moody’s, Fitch y S&P. Para estas agencias y las propias autoridades financieras de México, representadas en el Consejo de Estabilidad del Sistema Financiero (CESF) Pemex es una de las principales contingencias para las finanzas del sector público.
Esto debido a que Pemex ha mantenido su calificación a flote, solo por el respaldo que tiene del gobierno mexicano, debido a sus altas pérdidas en los últimos años.
5. Incertidumbre interna afectaría a la inversión y reduciría el consumo
Otro de los mayores riesgos para la economía es que la inversión no logre repuntar y el consumo privado se mantenga débil ante el entorno de «incertidumbre interna» en México.
Es decir, que los inversionistas detengan planes y proyectos debido a que consideren que no existen las condiciones dentro del país. También, los consumidores podrían reducir su gasto de forma precautoria, lo que debilitaría la recuperación económica.
Actualmente, casi dos terceras partes de los especialistas del sector privado consultados por Banxico señalan que es mal momento para invertir, según el último sondeo.
6. Que no se llegue a un acuerdo adecuado sobre la regulación de la subcontratación
Otro de los riesgos que ve el instituto central es que no se llegue a un acuerdo sobre la subcontratación (outsourcing). El gobierno federal ha mostrado una postura en contra de prácticas abusivas en esta modalidad de empleo, e impulsó una nueva legislación para regular al sector.
Pero la iniciativa privada argumenta que estas medidas pueden restringir la creación de nuevos puestos de trabajo, algo necesario para la recuperación económica.
Por ello, Banxico plantea que se debe llegar a un balance entre la protección que necesitan los empleados subcontratados y la flexibilidad que necesita el mercado laboral para crear empleos durante este periodo de crisis económica.
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