- Para dejar de morderte las uñas, intenta aplicar esmalte de uñas de sabor amargo, usar guantes o hacerte manicure con regularidad.
- Otra forma eficaz para dejar de morderte las uñas es probar el entrenamiento de reversión de hábitos, que cambia ese mal hábito por uno saludable.
- Este hábito puede aumentar el riesgo de infecciones y desfigurar permanentemente el crecimiento de las uñas, así como provocar otras lesiones.
La gente se muerde las uñas por muchas razones y es posible que no se dé cuenta de que lo está haciendo. Si bien es un hábito aparentemente inofensivo, morderse las uñas puede tener consecuencias relacionadas con la salud, incluidas infecciones bacterianas y uñas deformadas.
Aquí hay seis formas de dejar de morderse las uñas de una vez por todas.
1. Hazte manicure con regularidad
Cuando puedes echar a perder tu hermoso y nuevo manicure, morderse las uñas puede volverse menos atractivo. Además, el sabor químico del esmalte de uñas puede actuar como disuasivo.
El manicure tradicional pueden reducir la necesidad de morderse las uñas, pero la aplicación de gel o uñas postizas puede frenar aún más este mal hábito.
Es importante rehacer tu manicure poco después de que el anterior comience a descascarillarse para seguir rompiendo el hábito. Por supuesto, ir regularmente a que te hagan el manicure puede ser costoso. Por eso, si tú o alguien con quien vives puede hacerlo en casa, el efecto es el mismo.
2. Aplica un esmalte para uñas de sabor amargo
Aplicar un sabor espantoso o impactante a las uñas también puede disuadirte de morderlas. El esmalte de sabor amargo está ampliamente disponible en la mayoría de las farmacias para quien quiera dejar esa conducta.
También puedes hacer tu propia «aplicación amarga» en casa con la ayuda de ingredientes como los jalapeños o la sal. Al aplicar estos elementos en las uñas, mézclelos con algo pegajoso como la miel para asegurarse de que permanezcan. Puedes usar un hisopo de algodón o un cepillo pequeño para aplicar la mezcla.
Sin embargo, este método puede ser muy complicado y es difícil usar las manos mientras la mezcla permanece en las uñas.
3. Córtate las uñas con regularidad
«Mantén tus uñas cortas, así tendrás menos para morder», dice Gan Eng Cern, cirujano de oído, nariz y garganta en Singapur. «Con este truco, existe una alta probabilidad de que te desintereses de morder las uñas si tienes dificultades para alcanzarlas con los dientes».
Por supuesto, es posible que aún te muerdas los dedos. Morderse las uñas cuando son muy cortas puede causar irritación de la piel, sangrado y un crecimiento inadecuado de las uñas.
4. Prueba el entrenamiento de reversión de hábitos
Otra forma de dejar de morderte las uñas es el entrenamiento para invertir los hábitos. Es el proceso de sustituir un hábito poco saludable por una actividad diferente y más sano. Una vez que rompiste tu mal hábito, no es necesario continuar con la nueva práctica.
Hay muchos hábitos, tanto a corto como a largo plazo, que puedes intentar en lugar de morderte las uñas. Cuando sientas esa necesidad, los expertos recomiendan hacer lo siguiente:
- Mastica un chicle. «Esto mantendrá tu boca ocupada y evitará que te muerdas los dedos», dice Gan.
- Juega con algo en tus manos, como un anillo o una pelota antiestrés.
- Coloca una banda elástica alrededor de tu muñeca
- Muévete si puedes. «Cuando te encuentres mordiéndote las uñas, no seas duro contigo mismo; en cambio, levántate y haz algo diferente para desviar tu atención», dice Paul Greene, psicólogo de Manhattan, Nueva York.
5. Usa guantes
Cubre tus uñas con adornos para los dedos o guantes para evitar morderlas, dice Susan Bard, dermatóloga en Brooklyn, Nueva York. Si decides quitar esta barrera para morderte las uñas, serás más consciente del hábito y te detendrás.
Sin embargo, en climas cálidos, los guantes pueden estar sudorosos e incómodos. También pueden dificultar el uso de la pantalla táctil u otras acciones que requieran un movimiento preciso de la mano.
6. Encuentra tus desencadenantes
Si bien es posible que no seas consciente de morderte las uñas, pon atención a cuándo ocurre.
«Ya sea que estés nervioso o simplemente aburrido, saber cuándo y por qué te ayudará a comprender mejor el problema; lo que te permitirá encontrar una solución que pueda revertir la respuesta de tu cuerpo a las causas determinadas», dice Gan.
Greene está de acuerdo y sugiere crear un registro físico para consultar. «Haz un seguimiento de cuándo lo haces. Mantén un registro, en tu teléfono o en papel, de cada vez que te muerdes las uñas», dice. «Toma nota de lo que estabas haciendo en ese momento y dónde estabas. Esto te hará mucho más consciente de tu hábito y también te ayudará a elaborar una estrategia».
Según Gan y Greene, algunos desencadenantes comunes de morderse las uñas incluyen:
- Uñas largas
- Falta de esmalte de uñas
- Situaciones que provocan nerviosismo
- Aburrimiento
¿Por qué la gente se muerde las uñas?
Se cree que alrededor del 20% al 30% de la población general se muerde las uñas de forma crónica. Después de los 10 años, el hábito es más común en hombres que en mujeres. Si bien la razón exacta por la que las personas se muerden las uñas no está clara, algunos factores aumentan la probabilidad de una persona:
- Genética. Si tus padres se muerden las uñas o tienen un historial de morderse las uñas, es más probable que tú también lo hagas.
- Ansiedad. Es más probable que las personas se muerdan las uñas como mecanismo de afrontamiento si están ansiosas o estresadas.
- Aburrimiento.
«Morderse las uñas puede ser un eco de comportamientos que fueron adaptativos en puntos anteriores de la evolución, tal vez comportamientos de aseo personal. En última instancia, no sabemos por qué morderse las uñas es tan común», dice Greene. «Parece ocurrir con más frecuencia en personas con ansiedad, pero esto no nos dice por qué ocurre el comportamiento».
Si crees que morderte las uñas es resultado de un problema de salud mental subyacente, como la ansiedad, contacta a un profesional de la salud mental.
Por qué deberías dejar de morderte las uñas
Según Bard, las principales consecuencias negativas de este mal habito pueden ser:
- Transferencia de infecciones entre la boca y las manos, especialmente si sus manos están sucias.
- Sangrado.
- Crear cortes que permitan que las bacterias y los virus entren en la piel.
- Deformar permanentemente la uña.
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