- La aplicación de terceras dosis de la vacuna contra el Covid-19 deja de manifiesto las desigualdades en la inmunización.
- Las naciones más ricas extienden sus programas contra la variante Delta, más infecciosa que las anteriores.
- Tedros Adhanom Ghebreyesus, jefe de la OMS, pidió que se detuvieran los refuerzos hasta septiembre.
Alemania, Francia e Israel seguirán adelante con sus planes de inyectar refuerzos de la vacuna contra el Covid-19. Esto sin tener en cuenta un llamado de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de esperar hasta que más personas puedan inmunizarse en todo el mundo.
Esa decisión de seguir adelante con inyecciones de refuerzo destaca las enormes desigualdades en las respuestas a la pandemia. De hecho, las naciones más ricas extienden sus programas contra la variante Delta, más infecciosa que las anteriores.
Por su parte, el presidente Emmanuel Macron dijo que Francia trabaja en el despliegue de terceras dosis para las personas mayores y vulnerables a partir de septiembre.
También, Alemania busca dar refuerzos a pacientes inmunodeprimidos; adultos mayores y residentes de hogares de ancianos a partir de septiembre, dijo el Ministerio de Salud.
Además, el primer ministro israelí, Naftali Bennett, instó a los ciudadanos mayores a recibir una tercera inyección. Esto después de que en julio el gobierno inició una campaña para ofrecer dosis de refuerzo.
Pero el jefe de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, pidió el miércoles que se detuvieran los refuerzos hasta al menos finales de septiembre. Señaló que era inaceptable que los países ricos usaran los escasos suministros mundiales de vacunas para terceras dosis.
La disparidad de los países para conseguir vacunas de refuerzo
Los países de altos ingresos administraron cerca de 50 dosis por cada 100 personas en mayo; y ese número se duplicó desde entonces, según la OMS. En tanto, los países de bajos ingresos solo administraron 1.5 dosis por cada 100 personas, debido a la falta de suministros.
«Entiendo la preocupación de todos los gobiernos por proteger a su población de la variante Delta. Pero no podemos aceptar que los países que ya han utilizado la mayor parte del suministro mundial de vacunas acaparen más», dijo Tedros.
Sin embargo, Alemania rechazó las acusaciones; también, dijo que donaría al menos 30 millones de dosis de vacunas a los países más pobres.
Tras los comentarios de Tedros, la Casa Blanca dijo el miércoles que estaba preparada para proporcionar inyecciones de refuerzo si fuera necesario. Así, sugirió que tampoco prestaría atención al llamado de la OMS.
Pfizer dijo que probablemente se necesiten refuerzos en la vacunación. Esto debido a la disminución de anticuerpos después de seis meses.
Con información de Reuters.
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